Aunque el sol es el secador de ropa más económico, práctico y ecológico que hay, puede dañar tu ropa.
Además, secar tu ropa con el sol evita que se le generen hongos por la humedad; sin embargo, a pesar de su gran utilidad, exponer las prendas a la intemperie puede resultar perjudicial.
El primer daño que la ropa podría sufrir es la pérdida de color, por ello es recomendable tenderlas al revés y evitar dejarlas demasiado tiempo expuestas al sol.
Otra forma de prevenir y cuidar el color de tu ropa es utilizando detergentes que resalten sus colores; en La Comer tenemos varias marcas para que elijas la que mejor te convenga.
Por último, recuerda que siempre debes leer las etiquetas de la ropa, para que de esta forma sepas cuál es la mejor forma de lavarla y secarla, así ahorrarás tiempo, dinero y esfuerzo.