La presencia de malos olores en tu refrigerador indica la existencia de bacterias y posibles causas de enfermedades, por ello sigue estos consejos y cuida la salud de tu familia.
El mal olor en un refrigerador es causado principalmente por alimentos en descomposición o líquidos derramados, para evitar esto, limpia inmediatamente cualquier líquido derramado usando un paño húmedo con un poco de vinagre y bicarbonato mezclados en agua, así evitarás el cúmulo de cochambre y olores indeseados.
La limpieza recurrente es necesario, por ello procura realizarlo, al menos cada 15 días. Desmonta las bandejas y limpia cada rincón con una solución de 1/2 taza de bicarbonato de sodio disuelto en 2 litros de agua.
También, te recomendamos guardar dentro del refrigerador un tazón pequeño con granos de café, hojuelas de avena, un poco de bicarbonato de sodio o un pedazo de carbón vegetal para absorber los olores que puedan aparecer. Procura conservar tus alimentos en envases con tapa para que el aroma no salga o se contamine de otros.
El refrigerador cuenta con zonas más frías que otras, por eso trata de colocar los alimentos según la temperatura que necesiten. Por ejemplo, carnes y pescados van cerca del congelador, ya que es una de las zonas con temperatura más baja.
Los alimentos ya cocinados, se sitúan lo más próximo a la puerta o en la parte inferior. Los quesos, lácteos o embutidos van en medio, ya que son los productos que se consumen con regularidad y no necesitan de temperaturas extremas para su conservación.
No olvides que durante la temporada de calor el ambiente del refrigerador debe ser más baja que en días más fríos. No regular su temperatura puede generar la aparición de bacterias y malos olores.
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